Episodio 17
Siempre que no está recibiendo palizas en el club de karate después de la escuela, el estudiante de preparatoria Kenichi Shirahama suele estar con la cabeza hundida en uno de los muchos libros de autoayuda que lleva consigo todos los días. Un día, de camino a la escuela, Kenichi asusta accidentalmente a la nueva estudiante de su clase, lo que la lleva a tirarlo al suelo. Después de disculparse por sus violentos reflejos, se presenta como Miu Furinji y le pide a Kenichi que sea su amigo. Más tarde ese día, después del entrenamiento del club de karate, Kenichi recibe un ultimátum de uno de los otros miembros del club: pelearán la próxima semana y el perdedor tiene que abandonar el club para siempre. Mientras lamenta su inminente derrota en la próxima pelea, Kenichi ve a Miu defenderse de tres matones con facilidad. Harto de ser constantemente intimidado por aquellos más poderosos que él, le pide a Miu consejos para convertirse en un mejor luchador. Lleva a Kenichi al dojo de su abuelo, Ryouzanpaku, donde varios hábiles —aunque peculiares— maestros de artes marciales extremas se han reunido para perfeccionar sus habilidades. Miu promete que Kenichi se volverá mucho más fuerte, pero solo si logra sobrevivir. Con esas siniestras palabras rondando su mente y la aparición de una banda criminal de artes marciales conocida como "Ragnarok" amenazando la seguridad de quienes lo rodean, Kenichi da el primer paso en su camino para convertirse en un luchador de talla mundial y defensor de los indefensos.