Episodio 4
Nanami Momozono y sus familiares Tomoe y Mizuki han sobrevivido a varios desafíos desde que Nanami asumió el papel de diosa patrona del Santuario Mikage. Naturalmente, el dios del viento Otohiko viene a invitar a Nanami a la Asamblea Divina en Izumo, la casa de los dioses, y Nanami elige llevar a Mizuki con ella, dejando a Tomoe para hacerse pasar por ella en la escuela. Sin embargo, tiene un motivo oculto para asistir a la Asamblea Divina: descubrir el paradero del desaparecido Lord Mikage, el antiguo dios del santuario. Después de sus aventuras en Izumo, Nanami conoce a Botanmaru, un niño tengu que busca a alguien que conoce muy bien: al ídolo gótico Shinjirou Kurama, que se ha convertido en tengu. Botanmaru necesita que Shinjirou, su príncipe, regrese a casa al Monte Kurama y detenga la tiranía de Jirou, quien ha tomado el control de su ciudad natal. Sin embargo, Nanami pronto descubre que hay una fuerza mucho más oscura que Jirou en acción en la montaña. Como una diosa incipiente que se acostumbra cada vez más a la divinidad, Nanami se enfrenta a una rebelión tengu, sus crecientes sentimientos por Tomoe y un extraño hombre con lazos tanto con el pasado de Tomoe como con el futuro de Nanami.